Ibizcus 2009

 Buenas noches lectores…o “deslectores”….

Hoy las temperaturas han bajado bastante, por la noche…así que nada mejor que un buena copa de buen vino para afrontar la humedad nocturna, y como yo soy de contrastes… creo que lo mejor es un buen rosadito fresco, pero junto al fuego… que es lo perfecto.

Hoy hablaremos de un vino rosado de Ibiza, que creo que es de lo mejorcito que he catado como vinos elaborados en Ibiza, incluso me atrevería a decir que es el que más me gusta, dentro de la gama de rosados.

Ibizcus 2009

Es un vino que nada más servirlo podemos apreciar ciertos brillos que nos indican una viveza muy clara, es decir que esta en un momento óptimo de consumo, es un vino rosado muy al estilo francés en lo que a color se refiere, es decir:

Un rosado muy “clarito”, ha habido muy poca cesión de color en la elaboración de este vino.

Normalmente en los rosados españoles la cesión de color es bastante importante, obteniendo rosados de un color fuerte, más semejante al tinto que al blanco, sin embargo los franceses hacen los rosados con una minima cesión, por lo que los rosados son (a nivel de color) más parecidos a blancos que a tintos. Quien hubiese visto este vino entenderá muy fácilmente a lo que me refiero.

Es un vino que aromáticamente es poco intenso, por mucho que intenten hacerme “ver” infinidad de aromas, creo que en nariz no nos dice gran cosa, aunque también es cierto que en retronasal si que me salen algunos aromas más, entre ellos: fresa y cereza. También hay algo de mantecoso que me recuerda mucho a las lías… que creo que le da ese toque que le hace más interesante.

En boca es un vino que me sorprende, después de lo poco interesante que me ha parecido en nariz. Me destaca bastante el equilibrio, que creo es su punto fuerte (acidez muy presente, pero muy bien integrada, esencial para un buen rosado), es un vino con cierto volumen, pero le falta concentración. Siendo muy suave y “aterciopelado” (no me gusta utilizar estos descriptores, tan subjetivos, pero a veces ayudan para hacerse una idea) es algo corto. En el postgusto tiene un buen aliado, ya que tengo que reconocer que tiene una entrada de blanco y un final de tinto… algo esencial para un buen rosado.

Bueno no quiero aburriros más así que espero os animéis a tomaros una copita de la esencia de Ibiza a través de este rosadito.

Mañana igual seguimos con algún otro concepto de cata, dentro de la parte visual… veremos… (se aceptan sugerencias)

Buenas noches

Unai